¿Cual será nuestro empleo del futuro?

Esta tarde, mientras hacía mi ronda diaria de lectura de diversos medios digitales, me he encontrado con el siguiente titular: El 60% de los niños de cinco años tendrán trabajos que hoy no existen. El titular me ha sorprendido mucho y me ha hecho reflexionar durante unos instantes, sobre todo después de la discusión del otro día sobre SC o SI.

Leyendo la noticia se pueden extraer frases como "Fomentar el interés de los adolescentes por las nuevas tecnologías y desarrollar su creatividad, carácter emprendedor y liderazgo en la sociedad del futuro" o "El cambio de modelo económico actual lo propiciarán las tecnologías de la información y la comunicación, que son la piedra angular para construir una Europa innovadora y avanzada". Estas frases son muy similares a las que surgieron en clase durante la sesión del lunes, intentando fomentar la creatividad o un cambio económico gracias a las nuevas tecnologías. Talleres como el que se menciona en esta noticia puede ser una de las formas que comentamos para conseguir que los jóvenes hagan un buen uso de la información que proporcionan las nuevas tecnologías que ayude a mejorar la sociedad.

Sin embargo, me voy a quedar con el titular de la noticia, que por cierto, aunque es impactante e invita a leer la noticia, no tiene nada que ver con el contenido de la misma, ya que sólo es un comentario y no está ni siquiera argumentado. Dejando aparte cuestiones de buenas prácticas periodísticas, esta frase me hace reflexionar...¿Es algo exagerado?¿Es asumible?¿Tantos cambios están trayendo las TIC a nuestra sociedad?

Trayendo este titular a un caso cercano, he intentado analizar este dato del 60%. Personalmente, ni me imaginaba que iba a pasar horas y horas al día delante de un ordenador la primera vez que tuve contacto con uno de ellos. Fue por el año 91 y aquel 386 era lo último en tecnología, y las pocas tareas que se podían llevar a cabo con él eran un gran avance respecto a uno de sus antecesores, la máquina de escribir. Cualquier artilugio electrónico actual es varias veces más potente que aquella máquina. De entre mi grupo de amigos, algo similar les ha ocurrido a varios de ellos, por lo que los voy a utilizar como caso de ejemplo.

Del grupo de 14 que somos, 3 hemos estudiado carreras tecnológicas, teniendo empleos que antes no existían y otros 2 se han dedicado mediante la formación profesional a actividades actuales, como las energías renovables. El resto se dedican a actividades que, pese a que las TIC las han revolucionado, existían anteriormente, como la educación, química, salud, etc. Este somero estudio hace ver que un 36% de mi grupo de amigos nos estamos dedicando actualmente a profesiones que no existían cuando teníamos 5 años, además, este porcentaje seguro que tiende a aumentar con el paso del tiempo.

Si se extrapola la Ley de Moore al campo de las TIC, aunque es una aproximación muy poco exacta, cada vez hay herramientas más potentes, que contribuyen a poder crear herramientas aún más potentes cada vez más rápidamente, haciendo que nuestra sociedad avance a una velocidad imparable gracias al apoyo de las TIC.

Analizando mi ejemplo personal, en el que me puedo considerar dentro de la primera generación que tuvo acceso a las TIC a edades tempranas, y viendo que el 36% de mi grupo trabaja actualmente en empleos que no existían en mi niñez, ese titular que tanto nos puede sorprender, en realidad no es para tanto.

Sin embargo, que estos niños actuales vayan a trabajar en empleos que hoy ni siquiera existen, no deja de parecerme algo sorprendente, en cuanto a la velocidad a la que se está avanzando, y en muchas ocasiones, sin saber bien hacia dónde.